Si bien el mundo ya no centra su atención en la tragedia del ébola en África Occidental, la crisis continúa. Sin embargo, la colaboración de las personas que ayudan en el frente continúa dando frutos: este mes, comenzó a fluir agua limpia de un nuevo centro de WaterHealth en el condado de Bomi, Liberia.
El ébola sigue causando estragos en África Occidental y la entrega y el almacenamiento de agua limpia sigue siendo una de las armas más importantes para combatir la enfermedad. Detrás de una asociación que incluye a la Fundación McWane, la Coca-Cola Africa Foundation, WaterHealth International y la Global Environment & Technology Foundation, se entregan cerca de 22 millones de litros de agua segura de calidad aceptada por la Organización Mundial de la Salud a las unidades de tratamiento del ébola en Liberia. El agua es fundamental: una medición estima que se necesitan al menos 52 galones de agua por día para tratar a cada paciente con ébola (para beber, lavar la ropa y desinfectar las manos y el cuerpo de los pacientes). También es fundamental para limpiar la indumentaria usada por los médicos y las enfermeras. La ausencia de fuentes de agua confiables y la infraestructura de aguas residuales ha contribuido a una falta crónica de agua limpia en la zona. El trabajo para combatir la enfermedad es parte de la iniciativa Replenish Africa Initiative (RAIN), que apunta a proporcionar agua limpia y acceso sanitario a dos millones de personas para fines de este año.
"El agua segura, limpia y confiable no es un lujo, es una necesidad, especialmente al tratar una enfermedad como el ébola. Si bien el ébola ya no ocupa las portadas de los diarios, es una crisis que sigue cobrándose cientos de vidas todos los [días/semanas]", dijo G. Ruffner Page, Jr., Presidente de McWane, Inc.. "Y agradezco estar trabajando con un equipo de socios tan comprometidos".
La noticia de este mes es solo el último de los esfuerzos continuos de la asociación para ofrecer agua segura donde más se necesita. Mientras que muchos dan por sentado las infraestructuras hídricas que llevan agua segura y potable a nuestros hogares, el brote de ébola de 2014 en África Occidental fue otro recordatorio de los motivos por los que no debemos hacerlo. La infraestructura hídrica ayuda a evitar la propagación de enfermedades devastadoras y complementa los trabajos de erradicación y prevención de la enfermedad.
El año pasado, McWane aportó $100,000 y su vasta experiencia para ayudar a entregar agua a las clínicas de primera línea en Monrovia, la capital de Liberia, el epicentro del brote que causó pánico internacional en 2014.
Para más información acerca de los esfuerzos de la iniciativa RAIN, visite: http://www.getf.org/our-projects-partnerships/rain/
Para comunicarse con McWane: 205-871-9774 o media@mcwane.com